No hay ninguna esperanza
no hay ninguna esperanza
de que todo se arregle
de que ceda el dolor
y el mundo se organice.
no hay que confiar en que
la vida ordene sus
caóticas instancias
sus ademanes ciegos.
no habrá un final feliz
ni un beso interminable
absorto y entragado
que preludie otros dias.
tampoco habrá una fresca
mañana perfumada
para empezar alegres.
más bien todo el dolor
invadirá de nuevo
y no habrá cosa libre
de su macula dura.
habrá que continuar
que seguir respirando
que soportar la luz
y maldecir el sueño
que cocinar sin fe
fornicar sin pasión
masticar con desgano
para siempre sin lágrimas
Idea Vilariño